Hoy vamos a hablar de la digitalización de las finanzas, y más concretamente sobre la facturación electrónica y el cumplimiento de la Ley Crea y Crece en España. Pero primero, veamos la facturación electrónica desde un punto de vista más global. Actualmente podemos observar cambios constantes y, sobre todo, un creciente número de países que están regulando y haciendo obligatoria esta nueva modalidad para las empresas.

Situación de España con la Ley Crea y Crece

Si observamos la situación en España con la Ley Crea y crece, podemos ver que no es un caso aislado, países en otros continentes ya han implementado modelos de facturación electrónica desde hace más de 20 años, sobre todo si nos fijamos en países como pueden ser algunos de América Latina (Chile y México).

Es cierto que existe una gran evasión fiscal en algunos de ellos, de hecho, fue uno de los impulsores que hizo que hace 20 años estos países se adecuaran a la facturación electrónica. Pero hoy en día también podemos ver otros gobiernos en países de Asia, Oriente Medio y sobre todo en Europa, que están tomando medidas para regular esta forma de facturación.

Esta aceleración fue evidente después de la pandemia, puesto que las economías y las empresas menos digitalizadas fueron las más castigadas en dicho periodo. Hoy en día, la factura se ha convertido en el documento de moda para la automatización.

Empresas impulsoras de la Factuación Electrónica

Cuando hablamos de los impulsores principales de la facturación electrónica, podemos ver que, en muchos casos, son las propias empresas las que activamente buscan la eficiencia dentro de sus procesos financieros. Un ejemplo de ello es el intercambio de documentos electrónicos, que agiliza las operaciones dentro de los departamentos liberando a los empleados de tareas rutinarias y repetitivas y permitiéndoles así tener más tiempo para dedicarlo a actividades que generan un mayor valor para la organización.

La segunda motivación proviene de los gobiernos, que buscan aumentar esta facturación electrónica para combatir la evasión fiscal y reducir la brecha fiscal. Hacemos un pequeño paréntesis para centrarnos en el caso concreto que es España, que es un poco más particular, ya que el impulsor principal no fue tanto la necesidad de detener la evasión fiscal, si no para combatir la morosidad.

Por último, no podemos pasar por alto el valor fundamental de los datos en tiempo real de las facturas. Hay que tener en cuenta que una empresa con entidades legales en más de un país puede verse afectada por más de un modelo de facturación electrónica, por lo que es muy importante  y es clave para las empresas que, cuando se elija un proveedor de servicios se tenga en cuenta que dicho proveedor puede ayudar con todos los modelos de facturación electrónica que hay en las diferentes geografías implicadas.

Principales modelos de Facturación Electrónica

Hay varios modelos diferentes de facturación electrónica, aunque ahora nos centraremos únicamente en el modelo la de interoperabilidad, ya que es el que se va a llevar a cabo en España.

Para aquellos que no estén familiarizados con lo que es la interoperabilidad: se refiere al acuerdo de comunicación y formatos establecidos entre dos empresas de facturación electrónica. El beneficio que tiene esto para las empresas es que se elimina la restricción de que un cliente te exija que le envíes la factura a través de un proveedor en concreto, por lo que las empresas tendrán total libertad para seleccionar al proveedor que considere más adecuado para su negocio y va a ser responsabilidad de estos brokers de facturación electrónica, establecer la comunicación entre ellos.

La Ley Crea y Crece en España

Una vez contextualizado lo que está pasando a nivel global con la facturación electrónica, ahora sí, explicaremos lo que está pasando en España con la ley Crea y Crece.

Ya sabemos que en ámbito de las entidades públicas, la factura electrónica es obligatoria desde el año 2015 y en septiembre del 2022 se publicó el Decreto Ley de Crea y Crece que, entre muchas otras medidas, incluye la medida de la facturación electrónica. Las empresas que entrarán en la primera fase serán aquellas que facturen más de 8 millones de euros, mientras que el resto de las empresas tendrán dos años más para adaptarse a este nuevo modelo.

Sobre esta ley también sabemos que habrá una plataforma pública, la cual no se consideraba inicialmente, pero tras la consulta pública, muchas empresas, especialmente las más pequeñas, solicitaron que hubiera una plataforma que fuese gratuita. Será sencilla y de fácil manejo y a las empresas más grandes no les será suficiente.

En cuanto a los requisitos de la ley, debemos tener en cuenta:

• En las plataformas privadas podrán intercambiarse hasta cuatro formatos diferentes: Facturae, CII, EDIFACT, UBL
• La firma electrónica en las facturas será obligatoria
• Será obligatorio intercambiar los estados de factura
• La interoperabilidad en los diferentes operadores de facturación electrónica también serán obligatorios
• Por último, aunque no es un requisito obligatorio para operar, se recomienda que las empresas que elijan un operador privado, tengan en cuenta que tengan el certificado ISO 27001, referente a la seguridad de la información

Podéis repasar estos detalles en el artículo que publicamos en nuestro blog el pasado mes de septiembre: Novedades Obligatoriedad del uso de Factura Electrónica – Navex Consulting